El colágeno es un pilar fundamental para tu bienestar, ofreciendo beneficios clave que van más allá de lo estético:
El colágeno es crucial para la dermis, la capa más profunda de tu piel. Actúa como el andamiaje que la mantiene firme, hidratada y elástica. Al suplementarte con colágeno, podés notar una reducción de arrugas y líneas finas, una mejora en la elasticidad y una mayor hidratación general.
Este componente es indispensable para el cartílago, ese tejido protector que amortigua tus articulaciones. Consumir colágeno puede ayudar a aliviar el dolor y la rigidez, mejorar el funcionamiento articular y hasta prevenir enfermedades degenerativas como la osteoartritis. Es el soporte que tus huesos y articulaciones necesitan para mantenerse sanos y móviles.
El colágeno juega un rol vital en el crecimiento y la reparación muscular. Su suplementación puede contribuir a aumentar la masa muscular, mejorar la fuerza y resistencia, y disminuir el dolor que suele aparecer después del ejercicio intenso.
